Este verano he
tenido el blog un poco desatendido, las entradas han estado más espaciadas y he
ofrecido menos novedades. Además adoro el mes de septiembre para escaparme
buscando sol y así alargar un poco más la etapa estival. Así que me encuentro
en este momento, a punto de retomar de nuevo mi actividad laboral tras dos
semanas de descanso, sentado ante el ordenador para formalizar, también a
través de este espacio, el cambio de tiempo.
El
descanso es necesario para todo el mundo. El trabajo, que nos da de comer y nos
proporciona un techo bajo el que refugiarnos, que paga facturas y según he oído
nos dignifica (entiendo que sobre todo a quienes tenemos un trabajo
vocacional), también tiene un nivel de tensión que se libera en nuestros
tiempos de descanso.
Estas
vacaciones han sido de esas que hay que
marcar en rojo en el calendario. Septiembre de 2013: días excepcionales de
descanso, magníficos días de nuevas experiencias y de otras ya conocidas,
personas únicas con quienes seguir compartiendo momentos especiales y momentos
rutinarios. A mi lado quien siempre está y a mi lado personas nuevas que quizá
se queden para siempre.
Almería,
tierra de la compañera Belén, que se ha comprometido a indicarme rincones que
aún desconozco de su provincia, ha sido el escenario de mi vida relajada en
estos días que prometo recordar siempre. Y esta tierra que adoro y que tan
buenos momentos me ha proporcionado, merecía formar parte de la raíz de la
mandrágora, pues ambas tienen magia, están rodeadas de leyenda y según dicen,
son curativas. Además, ambas son maravillas de la naturaleza, regalos para
nuestros sentidos que revolucionan nuestras endorfinas a través de su belleza
única, dándonos salud y vitalidad.
Hoy
estoy nostálgico y me ha dado por escuchar la canción “Números cardinales” de Andrés
Suárez: si quieres, hacemos el verano
algo más largo, si quieres, nos quitamos la ropa y leemos algo… Esa es más
o menos la sensación que tengo tras regresar de la hermosa Almería en este
repentino comienzo del otoño. Ganas de alargar un poco más el verano, ganas de
olvidarme de la ropa unos días más, ganas de leer, de compartir un poco más de
tiempo con las personas que me han hecho feliz, ganas de sentir un poco más el
calor que en el duro invierno echaré tanto de menos.
Pero aunque en
ocasiones no pueda evitar hacerlo, este blog no se creó para contar mi vida
personal, y por eso quiero terminar esta entrada diciendo de nuevo HASTA AQUÍ,
aportando mi granito de arena a la campaña del Consejo General de Trabajo
Social. Porque pasado el verano, sigo siendo un ser libre que sólo calla cuando
el silencio es la respuesta, que sólo calla cuando no merece la pena hablar,
pero que sigue alzando la voz ante la injusticia incluso si el interlocutor se
tapa fuerte las orejas, porque si quiero, también soy capaz de gritar. Y porque
cuando se habla claro, incluso en susurros, el mensaje llega siempre a alguna
parte. Dicen que las palabras se las lleva el viento, pero también son poderosas,
van calando poco a poco, como el agua del mar.
Y
en este curso que comienza son muchos los temas que me siguen preocupando, pero
también quiero hablar de nuevas prácticas que estamos poniendo en marcha en mi
Centro de Servicios Sociales y de proyectos que me ilusionan. No sólo de
reivindicación vive el trabajador social.
Mientras
cojo fuerza para seguir batallando contra los elementos adversos, os dejo con
Andrés Suárez y su deseo de alargar un poquito más el verano. Escucho esta canción y recuerdo a las
personas con las que he pasado estos días. Y me emociona. Gracias chicos,
porque seguimos compartiendo.
Si quieres, hacemos
el verano algo más largo.
Si quieres, nos
quitamos la ropa y leemos algo.
Que la luna siempre
llena de tus besos.
Hoy
en mi recuerdo ocupa un lugar privilegiado el día pasado en la playa de los
muertos, en el entorno del Parque Natural del Cabo de Gata, y la visita al
pueblo de Las Negras. Quizá algún día, cansado un poco del mundo, busque allí
refugio por una buena temporada, dedicándome a hacer pulseras con hilos de
muchos colores y mirando cómo el sol sale y se pone mientras escucho el rumor
de las olas del mar. Y con poco más seré inmensamente feliz. Y es que la vida gira y gira...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMuy chulo
ResponderEliminarGracias Emilio, sabes que eres parte fundamental de estos días. Un abrazo!!!
EliminarHola Eladio, me alegro que tus vacaciones hayan sido tan bonitas y las hayas disfrutado,fuerza y ganas día a día para ganarte otro descanso estival. La canción preciosa la escucharé más de una vez. Un beso ladi.
ResponderEliminarComo he escrito, descansar y desconectar es fundamental para retomar la actividad con energías renovadas y más ganas. Me alegro que te guste la canción, disfrútala!! Gracias Carmina!!
EliminarAquí vuelvo rescatando una entrada antigua, mi especialidad!!! Es que esto es como un libro :).
ResponderEliminarHay una cosa que comentas, y es que el objetivo de este blog no es contar tu vida. En ese sentido los blogs han evolucionado bastante, y de esto también escribí en el mío porque me llama mucho la atención. Hace años, la gente abría un blog y contaba experiencias personales. Ahora eso ha desaparecido mucho, más que nada porque para eso está Facebook. Ahora lo normal es que los blogs sean temáticos. Al menos así son los blogs que consiguen visitas. Y, de hecho, si te suscribes a un blog de alguien que no conoces personalmente es porque te interesa la temática del blog.
De todos modos yo creo que, aunque no cuentes tu vida en el blog, al lector le tienes que llegar de alguna manera, que se vea que ahí hay una persona y qué tipo de persona. Y eso no se consigue con una escritura muy técnica sin más. No sé si me explico.
Por ejemplo, yo sigo un blog y el autor básicamente habla de diseño web. Yo de eso no tengo ni idea, pero el que lo escribe es tan gracioso y tan educado que da gusto leer y comentarle. De todos los blogs que sigo, que no son tantos, los que leo con más atención son aquellos en los que he conseguido conectar con el autor.
Me alegro de que te lo pasaras bien en la playa, a ver si algún año de estos vuelvo yo, como a mi hijo hasta ahora le daba miedo el mar, no se trata de ir allí y que te amargue los días.
Un abrazo grande!!!
Cómo me gusta que recuperes entradas antiguas y de esa forma hagas que el blog esté más vivo, dándome la oportunidad de volver a estos temas.
EliminarYo no puedo evitar contar cosas personales, pero es cierto que el objetivo del blog no es hablar de mi vida, que tiene bastante poco interés. Sin embargo, aunque no ejerza como trabajador social las 24 horas del día, no dejo de serlo, por lo que de forma habitual relaciono mis experiencias personales con temas sociales, de ahí que vaya todo un poco unido.
Tienes mucha razón también en que si se conecta con la persona que escribe, es más fácil que un blog "enganche", a mí me ocurre lo mismo. Detrás de lo que escribimos, estamos nosotros.
Un abrazo muy grande y disfruta de tu hijo!!!
Entonces genial, ya verás lo que voy sacando por ahí. Un abrazo :)
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